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Elige la que mejor se adapte a ti y disfruta 🖤
Llevo tiempo queriendo empezar este blog pero los principios me cuestan bastante.
¿Cómo empiezo? ¿Cuál debería ser el primer post? ¿Tiene que ser uno potente y que llame la atención o escribo lo que se me pase por la cabeza? ¿Debería tener un plan?
He estado MUCHO tiempo encajada en estas preguntas pero esta mañana de domingo he sido la primera de la casa en levantarme y tras desayunar y leer un ratito, me ha apetecido escribir sobre nada en concreto y sobre todo. Bueno a ver, quizás os he mentido: no he sido la primera en levantarme. Los flacos siempre son los primeros en despertarse y venir a tumbarse en nuestra cama hasta que nos levantamos los humanos.
Esta mañana desde las 7 les teníamos encajando sus puntiagudos huesos entre nosotros hasta que ha llegado un momento en el que no había postura en la que no me pinchasen con alguna pata y me he levantado.
Lo primero que he hecho ha sido vestirme (si a ponerme lo primero que he pillado con los ojos medio cerrados se le puede llamar “vestirse”) y he salido con ellos ha hacer el primer pis del día. A que lo hagan ellos, yo no puedo hacer esas cosas en la calle.
Hace unos días vimos un gatito bebé (guapísimo) en una ventana de nuestra calle. Es un bajo y Sherlock y Watson fliparon al verle a través de los barrotes. Le olieron hasta que el gato se hartó de ellos y se metió en casa. Desde ese momento absolutamente todos los días, nada más salir a la calle, se dirigen hacia esa ventana corriendo para ver de nuevo al gato. No hemos vuelto a verle pero ellos saben que vive ahí y confían en que aparecerá de nuevo. Ojalá yo fuese tan persistente como estos perros y no me rindiese ante dificultades en la vida, la verdad.
La de la foto es Bagueera (rebautizada en casa como Chococlack) una gatita que estuvo en casa unas horas hace un par de meses. Los flacos se enamoraron de ella hasta el punto en que nos replanteamos cómo de alérgicos a los gatos éramos en casa y si sería viable adoptarla.
No lo era, claro, pero nos gustó mucho verles juntos y comprobar cómo los perros son sensibles y cuidadosos con criaturas nuevas. Ya podríamos aprender todos de ellos
Pasear con Sherlock y Watson cuando pueden ir sueltos es mi momento favorito del día. Poder soltarles ha sido un proceso difícil, no por ellos, sino por nuestros miedos a lo que podría pasar. Ellos jamás nos han dado ni el más mínimo motivo para creer que si les soltásemos echarían a correr para no volver, pero ese temor nos mantuvo mucho tiempo en la seguridad de la correa larga.
Ojo, la correa larga es una opción genial si tú que me lees no tienes la posibilidad de soltar a tu perro. Cada perro-humano tiene su realidad y no tenéis por qué “alcanzar” ninguna meta porque no es una carrera. Te animo a pasear con tu perro y disfrutar de vuestra realidad, sea la que sea.
Desde el momento en que nos sentimos lo suficientemente seguros como para soltarles en entornos abiertos, no hemos parado de hacerlo siempre que podemos. Nuestro parque favorito para pasear sueltos es el Campo de las Naciones, en Madrid. También nos gusta mucho el Parque Forestal de Valdebevas, que lo descubrimos hace unos meses y es más “salvaje” que el Campos de las Naciones.
Hay muchos conejos, eso sí, y Sherlock y Watson se vuelven locos corriendo tras ellos. Nunca han llegado a atrapar ninguno y realmente no les vemos ninguna intención de hacerlo sino que más bien sienten curiosidad pero no nos gusta que les asusten así que procuramos evitar las zonas en las que sabemos que hay más madrigueras.
Algo que nos salva la vida en esos sustos es que lleven puesto algo de ropa llamativa. Usamos muchísimo los petos de licra tanto para que sea más fácil verles en la distancia como para mantenerles fresquitos cuando hace calor y evitar que se arañen con arbustos. Este de las fotos es de El Galgo Azul y sus petos son los mejores que conocemos.
Pasear con ellos es uno de mis momentos favoritos del día, eso es cierto, pero… desayunar es mi otro momento absolutamente favorito. De hecho, si puedo desayunar sola, lo prefiero. Me gusta todo el ritual de hacer el café, preparar lo que vaya a comer esa mañana y sentarme al sol a leer. Ultimamente, me ha dado muy fuerte por el porridge de avena con crema de cacahuete y es lo que desayuno la mayoría de días. Es super fácil de hacer, llena mogollón y está delicioso. Si te apetece probarlo, te dejo la receta del que hago yo:
Y ahora te contaré algo que me enfada: yo, al igual que muchísimas personas en el planeta, llevo años esperando que se publique el tercer libro de Patrick Rothffus de la trilogía Crónica del Asesino de Reyes. Hace casi 10 años que leí el segundo y llevo escuchando que el tercero está a punto de salir casi todo ese tiempo. Y siempre es mentira.
El caso es que cada año hay rumores de que va a publicarse (y cada año acaban siendo falsos) pero este año parecía que era el año al fin. Problema: hace casi diez años que leí el segundo, lo que significa que recuerdo el nombre del protagonista y poco más. No podía leer el tan ansiado tercer libro sin recordar nada de la historia, así que hace unos días me empecé a releer el primero. Mi novio me regaló una versión de tapa dura que pesa como un bebé de 6 meses y voy por la vida con tremendo bloque de cemento.
Estoy disfrutando muchísimo leerlo de nuevo pero ¿sabes qué ha pasado con los rumores de que este era el año de la publicación del tercero y último libro? Claro que lo sabes: son, de nuevo, rumores falsos.
Así que aquí estoy yo, releyendo la historia pera estar preparada en el momento en el que por fin salga el último libro pero corriendo el riesgo de que entre que acabe de leerla y salga pasen otros 10 años y vuelva a no acordarme de nada y caiga en un incesante bucle en el que mi vida se resuma a leer Crónica del Asesino de Reyes y olvidarla.
En cualquier caso, la historia lo merece porque es maravillosa. Así que, si aún no has leído estos libros, te los recomiendo muchísimo. Pregunta en la librería de tu barrio que seguro que te los pueden conseguir. Si te gusta la fantasía, la magia, la aventura y las historias bien contadas, te va a flipar. Además, ¡ya mismo sale el tercer libro! (es mentira).
Después de leer he estado trabajando en mi transición de Plant Killer a Plant Mom. En estos últimos meses he mejorado mucho y ya casi nunca mato plantas. Como consecuencia, he llenado de verde la casa y aunque el inglés las odia ha aprendido a medio tolerarlas. ¡Pero es que ser una Plant Mom requiere de mucho trabajo! Cada día les presto atención, reviso y quito hojas secas, riego si hace falta… Mi tendencia natural es matar plantas así que lucho muchísimo por dejar de ser asesina y pasar a cuidadora experta.
Hoy he estado arreglando un estropicio que yo misma creé. Hace semanas compré un senecio radicans (también conocido como “cadena de bananas”), que es una planta colgante preciosa y relativamente fácil de mantener. El caso es que me la estaba cargando por exceso de agua y por pulverizarla cuando, al parecer, está muy desaconsejado.
Se estaba poniendo feísima así que he optado por rescatar las ramas que aún se mantenían vivas y replantarlas. Google dice que tengo que esperar un par de días entre que las corto y las planto así que eso haré. Así, si no funciona, será culpa de internet, no mía y podré seguir llamándome Plant Mom porque yo lo hice lo mejor que supe. Todo está calculado.
La verdad es que cuidar de mis plantas es algo que he ido aprendiendo a hacer y he descubierto que me encanta. Me entretiene, me distrae de otras cosas, me calma y me anima a aprender cosas nuevas. Me da muchas alegrías al ver a una planta prosperar y sacar hojas nuevas pero también frustraciones al ver que mis cuidados la acercan más a la muerte. Está bien lidiar con esos sentimientos y aprender a manejarlos.
Total, que después de pasear a mis perros, desayunar rico, leer y cuidar de mis plantas, aquí estoy. Me he sentado ante el ordenador a escribir esto para quien quiera leerlo con ninguna intención salvo presentar un poco este nuevo espacio: MI BLOG.
Habitualmente tengo muchas cosas en la cabeza, muchas historias y reflexiones que me encanta compartir. Vengo usando Instagram para ello pero creo que esta opción me gusta mucho más y espero que a ti que me lees te parezca lo mismo.
Y he decidido arrancar con este post que no me ha llevado semanas de planificación y es muy mejorable pero está hecho y he empezado, por fin.
Hecho es mejor que perfecto.
Te doy la bienvenida a este rincón siempre que quieras.
Prepárate un café para leerme porque hablo mucho y escribo mucho.
Disfruta del ratito y saca algo positivo de esto.
Espero que encuentres aquí un lugar seguro en el que aprender, divertirte y compartir experiencias.
¡Nos leemos pronto!
Nuevas etapas, nuevos comienzos, nuevos horizontes, nuevos proyectos …a veces los cambios nos asustan, nos frenan, pero sienta muy bien cuando damos el paso siendo fieles a nosotros y a lo que sentimos y nos apetece hacer, y creo que recuperar el mundo del blog (que las RR.SS lo dejaron bastante tocado pero no hundido) es fantástico!!!
Y tu primera entrada (venga va diré post jajaja) es HECHA, me ha gustado mucho esa reflexión, hecho mejor que perfecto 👏🏻👏🏻👏🏻 Gracias por compartir parte de tu “mundo” con nosotros
Me gusta tu blog; y la receta del porridge también.
Ohhh me ha encantado leerte Tania :) enhorabuena por haber empezado este proyecto, me apunto ese porridge que tiene pintaza!
Me parece fantástico que hayas dado este paso, entre tanto Reel y Tiktok se estaba perdiendo la esencia del Blog y a mi particularmente me encanta. Así que bravo por rescatarlo. Estaremos atentos a tus “cartitas“ ♥️
Pos supercontenta de poder leerte!!!!